Con la finalidad de evitar tropiezos en el perímetro del área de juegos infantiles del Jardín Miguel de Cervantes, la brigada de Obras y Servicios ha procedido a rellenar los laterales que la delimitaban con una base de 10 cm de zahorra artificial, 4 cm de árido tipo Fuldren, terminándose con una aplicación de resina estabilizante para reducir la producción de polvo y la erosión de la superficie.
De esta manera se consigue que la zona de juegos para niños sea más segura y más accesible.