Así lo han solicitado al Consejero de Medio Ambiente de la Comunidad Autónoma y al Ministerio de Medio Ambiente.
Representantes de varias asociaciones de propietarios de fincas ubicadas en espacios naturales de Murcia, entre las que se encuentran la Asociación de Propietarios de Sierra Espuña (APESE), la del Llano de Las Cabras y la de Sierra de La Tercia –además de la Federación de Asociaciones de Propietarios de Espacios Naturales de Murcia (FAPEN)– reunidos con los Presidentes de COAG del del Bajo Guadalentín, Isidoro Cayuela, y de Lorca, Miguel Padilla, que es también responsable regional de ganadería de COAG y miembro de la Ejecutiva Estatal de esta Organización, así como con el presidente de COAG de Alhama de Murcia, José Manuel Ruíz; han llegado a la conclusión de que es necesario catalogar al arruí como especie exótica e invasora y, en consecuencia, proceder a su desaparición de Sierra Espuña y su entorno y de toda la Región de Murcia, para evitar los continuos daños y perjuicios que el arruí esta ocasionando en fincas agrícolas, así como a la ganadería tradicional y a los propietarios de fincas en espacios naturales y en la Reserva de Caza y Parque de Sierra Espuña desde que llegó a primeros de los años 70, importado desde el Atlas marroquí con fines cinegéticos.
En el escrito, que se ha remitido al Consejero de Presidencia y Medio Ambiente de Murcia y al Director General de Medio Natural del MARM, se relata la trayectoria del arruí desde su llegada en 1970 a Sierra Espuña, así como su proliferación y expansión incontrolada en el entorno de los términos municipales de Espuña, y su asentamiento en las pedanías altas de Lorca y en la Sierra de María (Almería), incumpliéndose además impunemente toda la normativa establecida en el PORN (Plan de Ordenación de los Recursos Naturales) del Parque de Sierra Espuña tanto en lo que se refiere a la indemnización de daños a los agricultores, como al número máximo de arruís autorizado, así como al estudio de compatibilidad con el Parque que debía de haber realizado hace doce años.
También se hace un balance de los efectos del arruí en sus casi 40 años de presencia en Murcia, valorando que los efectos negativos han sido sustancialmente superiores a los positivos ya que estos últimos han sido sólo en parte para la caza, mientras que el arruí ha destruido y desplazado tanto flora como fauna autóctona y ha hecho desaparecer o abandonar la mayor parte de los cultivos del Parque de Sierra Espuña y su entorno, habiendo ampliado considerablemente su radio de acción a zonas de cultivos intensivos, al amparo de los llamados corredores ecológicos que además pretenden hacer prevalecer las funciones de circulación de arruí y otra fauna, mientras que se restringen o impiden otros usos agrícolas y se genera una sensación de indefensión e impunidad frente a los constantes daños que se generan.
Las organizaciones agrarias y de propietarios firmantes coinciden en esta petición de declaración del arruí como especie protegida exótica e invasora a desaparecer, sumándose a las organizaciones ecologistas de la Región ANSE y Ecologistas en Acción, que habían formulado en los últimos meses, esta misma petición, coincidiendo con el momento en el que se está debatiendo a nivel nacional establecer por Decreto el catálogo de especies exóticas o invasoras.