Mazarrón es el 5° municipio de la Región de Murcia con menos deuda viva por habitante a fecha 31 de diciembre de 2012, según se desprende de los datos hechos públicos por el ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas. En concreto, las arcas municipales presentan una deuda de tan sólo 146 euros por habitante. Sólo se encuentran por delante Ulea (con déficit 0), Alhama de Murcia (51 euros), Águilas (85 euros) y Campos del Río (105 euros).
Para el Alcalde de Mazarrón, Ginés Campillo, "se trata de un buen dato que refleja el esfuerzo que estamos llevando a cabo desde el Ayuntamiento para rebajar la deuda municipal. Una deuda que, si sumamos la financiera a la de proveedores, estará actualmente en torno a las 23 millones de euros, habiéndose reducida la misma en unos 9 millones de euros en dos años en los que, no sólo hemos mantenido los servicios, sino que se han aumentado".
Mazarrón, con una población mucho más dispersa que otros municipios costeros de la Región por su amplia extensión de terreno, presenta unas muy buenas cifras a pesar de este hándicap. En San Pedro del Pinatar la deuda por habitante supera los 900 euros, en Los Alcázares es de 600 euros de deuda viva por persona, y en San Javier roza los 500 euros.
Además, si por población se refiere, también se da la circunstancia que municipios igual de poblados que Mazarrón presentan también unos datos que es destacable comparar. Así, Yecla, con 34.601 ciudadanos censados, presenta una deuda de 484 euros por habitante; Cieza, con 35.351 habitantes, presenta una deuda de 265 euros y Totana, con 30.549 censados, arroja un dato de 1.374 euros por habitante.
De hecho, son bastantes municipios lo que superan los 1.000 euros por habitante como Aledo (2.206 euros por habitante), Beniel (1.362 euros), Alcantarilla (1.289), Caravaca de la Cruz (1.274), Fuente Álamo (1.253), Ojos (1.318), Archena (1.179), Moratalla (1.112), Torre Pacheco (1.018) y Abanilla (1.012). Asimismo, la deuda en Mazarrón se sigue reduciendo al haber hecho frente al pago de la deuda con la empresa Urbaser. Un problema histórico que las anteriores corporaciones no han sabido solventar y que estará completamente saldada en 2018.