La Jefatura Provincial de Tráfico de Murcia, dentro de las campañas especiales de vigilancia que la DGT tiene programadas para 2015, pone en marcha, a partir del día 30 de este mes de noviembre, una operación de control de los autobuses destinados al transporte de menores escolares por las carreteras de la Región de Murcia.
A lo largo de esta campaña, que concluirá el día 4 de diciembre, se prevé que los agentes del Sector de la Guardia Civil de Tráfico inspeccionen alrededor de 150 vehículos. En esta nueva operación colaborarán los ayuntamientos de Abarán, Águilas, Alcantarilla, Alguazas, Alhama de Murcia, Beniel, Bullas, Calasparra, Fortuna, La Unión, Mazarrón, Molina de Segura, Puerto Lumbreras, San Javier y Santomera.
Los agentes efectuarán inspecciones sobre los vehículos (autorizaciones, documentos, condiciones técnicas, elementos de seguridad, cinturones y sistemas de retención infantil), y sobre los conductores (permiso de conducción, tiempos de conducción y descanso, etc.), tanto en vías urbanas como en vías convencionales, siendo en éstas últimas donde se producen 2 de cada 3 víctimas infantiles mortales.
Desde la Jefatura Provincial de Tráfico se insiste en que desde octubre de 2007 se deniega la matriculación a cualquier autobús que no lleve instalados los sistemas de retención (cinturones de seguridad). Hay que tener en cuenta que un menor sin ningún tipo de retención, multiplica por cinco las posibilidades de sufrir lesiones mortales, por lo que el interés de la DGT en esta campaña consiste en seguir las líneas básicas de la Estrategia de Seguridad Vial 2011-2020, aprobada en febrero de 2011 por el Consejo de Ministros, consiguiendo que no haya ningún menor fallecido sin sistema de retención infantil.
El 90% de los accidentes que se producen durante el transporte escolar tienen lugar en el momento de subir o bajar del vehículo, o justo en los instantes inmediatos, y en muchos casos se trata de atropellos causados por una distracción del menor, del conductor del transporte escolar, o de los padres.